Entrevista radial con Izamar Hernández, jugadora de la Liga Nacional de Fútbol Femenino de Honduras, estudiante de Dirección Técnica, profesora de Educación Física, y apasionada de los deportes
Literalmente, en cada ámbito de la vida humana, las mujeres estamos reclamando con más fuerza, vitalidad y colectividad nuestro derecho a hacer lo que soñamos… Decidir lo que nos gusta… Accionar por lo que queremos… Cualquier persona debe de vivir esas libertades, tan básicas.
Escuchemos a Iza, que nos comparte otra realidad de las mujeres contada a través de su experiencia futbolera.
Hoy, las mujeres reclamamos con fuerza nuestro derecho a mover nuestro cuerpo, sentirlo y disfrutarlo de maneras distintas, y uno de esos disfrutes corporales indudablemente es a través de la práctica deportiva y la actividad física, sea cuál sea.
En los últimos 20 años, se han multiplicado las semillas que desde hace más de 10 décadas las abuelas deportistas han venido sembrando, para que hoy, en una buena cantidad de geografías, las mujeres gustosas de los deportes, puedan tener mayores posibilidades para disfrutar ese gusto de múltilples formas.
Son innumerables las historias de mujeres y colectividades de mujeres que han quebrado con la historia oficial patriarcal en múltiples y muy variadas disciplinas y logros deportivos, casi todas negadas y ninguneadas por la sociedad.
No olvidamos que, el hombre históricamente- y hasta hace muy pocos años- era el amo y señor de esos territorios: tanto el de nuestros cuerpos como el de los deportes- ya fuese profesional, ya fuese aficionado/lúdico.
Cada vez más se derriban los mitos y argumentaciones conservadoras que limitan a las mujeres a vivir el deporte y/o las prácticas deportivas libremente. Ya no hay ninguna justificación para que una chica no practique el deporte que escoja jugar en plena libertad y conciencia.
El fútbol femenino y la inclusión de las mujeres en el fútbol, ya sea como aficionadas, jugadoras, técnicas, comunicadoras especialistas en fútbol y/o mejengueras, son realidades que se replican-cada vez con más fuerza- en muchos lugares del mundo. Quizás, es la forma más notoria del pequeño gran avance de las discusiones en torno a nuestro derecho a vivir los mundos de los deportes.
Y entonces también, hoy existen discusiones de cómo el futbol de mujeres tiene otro espíritu, otra forma de jugarse distinta al fútbol masculino. Quizás, es pórque aún el fútbol de mujeres no se deja absorber por dos de las características más nocivas que presenta el fútbol masculino profesional.
Por un lado, la industria del entretenimiento aún no le termina de otorgar el lugar que le asignó el gran capital a los deportes masculinos, cuando descubrió el potencial masivo que había en ello.
Y por otro lado, la heteronormatividad y los rasgos de masculinidad tóxica, en el fútbol de mujeres aún no se reproducen con la brutalidad con la que lo hacen en el mundo del fútbol profesional, conservador y mediático, es decir, en el fútbol masculino profesional y aficionado.
Desde hace más de una década, en diversas partes de América, existen colectividades de mujeres futboleras que reivindican no sólo el derecho a practicar el deporte, sino que cuestionan y debaten sobre cómo el patriarcado y el capitalismo nos roba uno de los placeres humanos que es el juego, y nos rapta una gran herramienta para el encuentro social y político organizativo.
Desde Radio 8 de Octubre creemos que vivir y gozar de los deportes de otras formas es posible, vivirlas distinto a como lo venden en la televisión -recientemente- privatizada por las empresas de servicios de televisión digital.
Consideramos que el ámbito deportivo es otro de los tantos territorios en disputa al patriarcado, al gran capital, y al racismo, para devolverlo al pueblo, para que sea una forma de convocar a la colectividad y motivar espacios de diálogo, para re inventar las reglas que impone el «deporte industrial», y por que no, para remover el cuerpo, la mente, y el corazón un ratico.
Compartimos la palabra de Izamar Hernández, ella es jugadora de fútbol de la Liga Nacional en Honduras, profesora de Educación Física, estudia para ser Directora Técnica, y es sin duda una gran pionera en el fútbol femenino, no sólo de San Pedro Sula donde reside, sino de toda la región centroamericana.
Esta es una parte de una extensa entrevista que le realizamos a principios del mes de agosto.
En esta entrevista, Isa nos expone claramente el por qué el futbol seguirá siendo el deporte que rebela ampliamente las entrañas de lo que vivimos los pueblos y las mujeres en los barrios, en las colonias, y en las comunidades.
Iza nos recuerda cómo también las mujeres en el fútbol “institucionalizado” son víctimas de diferentes formas de violencias sexuales, una realidad que no es exclusiva de Honduras, sino que ocurre también en Costa Rica – e, indudablemente- en muchas otras geografías. Iza denuncia la falta de oportunidades para que las niñas que gustan de este deporte puedan disfrutar de espacios seguros para hacerlo, desde pequeñas.
Gracias a la entrevista con Izamar Hernández, nos permitimos volver a plantear preguntas tan básicas como: ¿por qué el deporte no puede ser un lugar de encuentro y autocuido colectivo? ¿Por qué el ser madre o tener el periodo menstrual podría impedirle a una mujer ser una deportista de alto rendimiento? ¿Cuántas mujeres han desertado de sus sueños futboleros por miedo al dirigente del club, al entrenador o al aguatero? ¿A cuántas se les dijo que el fútbol era de hombres, tuvieron que jugar con hombres para poder marcar una diferencia en su deporte? ¿Por qué las mujeres no tienen el mismo espacio que los hombres en los espacios de comunicación corporativos? ¿Por qué las federaciones deportivas destinan menos recursos a las mujeres que a los hombres? ¿Por qué las mujeres no reciben sueldos ni firman contratos en los equipos de primera división –al menos?
Este reportaje se publicó en el programa semanal de Radio 8 de Octubre, edición 17 de setiembre 2020.