El embajador imperial, o sea, el embajador de los Estados Unidos, se va de Costa Rica. Y resulta que en la Cancillería le hicieron un homenaje textualmente el Diario extra dice: “Stagno ofreció un homenaje al representante de los Estados Unidos de América durante una ceremonia celebrada la noche del lunes en el Salón Dorado de la Cancillería, con la asistencia del Cuerpo Diplomático acreditado en nuestro país.”
Mark Langdale se va para su Texas natal, ya sabíamos que era un vaquero tejano, a dirigir una biblioteca. De embajador a director de biblioteca. Se va a dirigir la biblioteca George Walker Bush.
Nos parece sumamente irónico que haya una biblioteca con el nombre de alguien quien posiblemente apenas lee, o sea, quien apenas entiende lo que lee, porque Bush, así como que muy brillante, no es.
Ascenso o descenso no lo sabemos, y en realidad no nos importa. Como tampoco nos importa si le va mal a este señor, para que quede claro, no le deseamos éxito en su difícil tarea a Langdale.
Y es que a contrapelo de lo que manifiesta Stagno, no consideramos que Langdale haya sido un interlocutor.
Sencillamente porque no puede ser interlocutor quien ordena qué hacer, y eso fue lo que hizo este personaje imperial. Langdale en ningún momento dialogó, es más no tenía porqué hacerlo, el aprobar o no el TLC, es una potestad soberana de nuestro país, y ningún embajador tiene porqué meter las narices en estos asuntos.
Langdale, estuvo haciendo campaña abiertamente a favor del sí, de hecho Langdale fue quien pidió la intervención imperial desde Washington, recordamos que el mismo embajador lo confirmó en vivo el 7 de octubre cuando lo cuestionamos en el Tribunal Supremo de Elecciones.
En esa ocasión dijo con todo cinismo, y por supuesto con la complacencia de las autoridades de este país, y como no, de la prensa, que él había solicitado a la Casa Blanca que se pronunciara, según él para aclarar el asunto.
Pero la cosa no se quedó ahí el embajador gringo estuvo visitando empresas, y si eso no es meterse en los asuntos internos del país, no sabemos entonces que entiende el Tribunal Supremo de Elecciones por intervención extranjera en un proceso de decisión como el referendo.
El Tribunal Supremo de Elecciones ante denuncias de los sectores sociales le tiró la pelota a la Cancillería, aduciendo que no tenía competencia, y como vemos, la resolución de la Cancillería fue un homenaje.
Esperamos que el señor Stagno haya tenido la suficiente vergüerza, personal y profesional, como para que, por lo menos, alguien más haya puesto la alfombra, ya sería el colmo tanto servilismo.
Finalmente, aunque los productores de Radio 8 de Octubre no somos profesionales en Relaciones Internacionales, pero sí tenemos un poquito de dignidad, tenemos perfectamente clara cuál es la diferencia entre diplomacia y servilismo, es una lástima que el señor Stagno con una carrera académica tan brillante en esa materia, no entienda cuál es la diferencia.“Por tratarse de un tema con un claro componente bilateral, usted fue un interlocutor natural, que pudo presenciar y participar, dentro de las normas diplomáticas, en varias etapas de este difícil proceso”, comentó el Canciller Stagno.
El embajador imperial, o sea, el embajador de los Estados Unidos, se va de Costa Rica. Y resulta que en la Cancillería le hicieron un homenaje textualmente el Diario extra dice: “Stagno ofreció un homenaje al representante de los Estados Unidos de América durante una ceremonia celebrada la noche del lunes en el Salón Dorado de la Cancillería, con la asistencia del Cuerpo Diplomático acreditado en nuestro país.”
Mark Langdale se va para su Texas natal, ya sabíamos que era un vaquero tejano, a dirigir una biblioteca. De embajador a director de biblioteca. Se va a dirigir la biblioteca George Walker Bush.
Nos parece sumamente irónico que haya una biblioteca con el nombre de alguien quien posiblemente apenas lee, o sea, quien apenas entiende lo que lee, porque Bush, así como que muy brillante, no es.
Ascenso o descenso no lo sabemos, y en realidad no nos importa. Como tampoco nos importa si le va mal a este señor, para que quede claro, no le deseamos éxito en su difícil tarea a Langdale.
Y es que a contrapelo de lo que manifiesta Stagno, no consideramos que Langdale haya sido un interlocutor.
Sencillamente porque no puede ser interlocutor quien ordena qué hacer, y eso fue lo que hizo este personaje imperial. Langdale en ningún momento dialogó, es más no tenía porqué hacerlo, el aprobar o no el TLC, es una potestad soberana de nuestro país, y ningún embajador tiene porqué meter las narices en estos asuntos.
Langdale, estuvo haciendo campaña abiertamente a favor del sí, de hecho Langdale fue quien pidió la intervención imperial desde Washington, recordamos que el mismo embajador lo confirmó en vivo el 7 de octubre cuando lo cuestionamos en el Tribunal Supremo de Elecciones.
En esa ocasión dijo con todo cinismo, y por supuesto con la complacencia de las autoridades de este país, y como no, de la prensa, que él había solicitado a la Casa Blanca que se pronunciara, según él para aclarar el asunto.
Pero la cosa no se quedó ahí el embajador gringo estuvo visitando empresas, y si eso no es meterse en los asuntos internos del país, no sabemos entonces que entiende el Tribunal Supremo de Elecciones por intervención extranjera en un proceso de decisión como el referendo.
El Tribunal Supremo de Elecciones ante denuncias de los sectores sociales le tiró la pelota a la Cancillería, aduciendo que no tenía competencia, y como vemos, la resolución de la Cancillería fue un homenaje.
Esperamos que el señor Stagno haya tenido la suficiente vergüerza, personal y profesional, como para que, por lo menos, alguien más haya puesto la alfombra, ya sería el colmo tanto servilismo.
Finalmente, aunque los productores de Radio 8 de Octubre no somos profesionales en Relaciones Internacionales, pero sí tenemos un poquito de dignidad, tenemos perfectamente clara cuál es la diferencia entre diplomacia y servilismo, es una lástima que el señor Stagno con una carrera académica tan brillante en esa materia, no entienda cuál es la diferencia.“Por tratarse de un tema con un claro componente bilateral, usted fue un interlocutor natural, que pudo presenciar y participar, dentro de las normas diplomáticas, en varias etapas de este difícil proceso”, comentó el Canciller Stagno.
El embajador imperial, o sea, el embajador de los Estados Unidos, se va de Costa Rica. Y resulta que en la Cancillería le hicieron un homenaje textualmente el Diario extra dice: “Stagno ofreció un homenaje al representante de los Estados Unidos de América durante una ceremonia celebrada la noche del lunes en el Salón Dorado de la Cancillería, con la asistencia del Cuerpo Diplomático acreditado en nuestro país.”
Mark Langdale se va para su Texas natal, ya sabíamos que era un vaquero tejano, a dirigir una biblioteca. De embajador a director de biblioteca. Se va a dirigir la biblioteca George Walker Bush.
Nos parece sumamente irónico que haya una biblioteca con el nombre de alguien quien posiblemente apenas lee, o sea, quien apenas entiende lo que lee, porque Bush, así como que muy brillante, no es.
Ascenso o descenso no lo sabemos, y en realidad no nos importa. Como tampoco nos importa si le va mal a este señor, para que quede claro, no le deseamos éxito en su difícil tarea a Langdale.
Y es que a contrapelo de lo que manifiesta Stagno, no consideramos que Langdale haya sido un interlocutor.
Sencillamente porque no puede ser interlocutor quien ordena qué hacer, y eso fue lo que hizo este personaje imperial. Langdale en ningún momento dialogó, es más no tenía porqué hacerlo, el aprobar o no el TLC, es una potestad soberana de nuestro país, y ningún embajador tiene porqué meter las narices en estos asuntos.
Langdale, estuvo haciendo campaña abiertamente a favor del sí, de hecho Langdale fue quien pidió la intervención imperial desde Washington, recordamos que el mismo embajador lo confirmó en vivo el 7 de octubre cuando lo cuestionamos en el Tribunal Supremo de Elecciones.
En esa ocasión dijo con todo cinismo, y por supuesto con la complacencia de las autoridades de este país, y como no, de la prensa, que él había solicitado a la Casa Blanca que se pronunciara, según él para aclarar el asunto.
Pero la cosa no se quedó ahí el embajador gringo estuvo visitando empresas, y si eso no es meterse en los asuntos internos del país, no sabemos entonces que entiende el Tribunal Supremo de Elecciones por intervención extranjera en un proceso de decisión como el referendo.
El Tribunal Supremo de Elecciones ante denuncias de los sectores sociales le tiró la pelota a la Cancillería, aduciendo que no tenía competencia, y como vemos, la resolución de la Cancillería fue un homenaje.
Esperamos que el señor Stagno haya tenido la suficiente vergüerza, personal y profesional, como para que, por lo menos, alguien más haya puesto la alfombra, ya sería el colmo tanto servilismo.
Finalmente, aunque los productores de Radio 8 de Octubre no somos profesionales en Relaciones Internacionales, pero sí tenemos un poquito de dignidad, tenemos perfectamente clara cuál es la diferencia entre diplomacia y servilismo, es una lástima que el señor Stagno con una carrera académica tan brillante en esa materia, no entienda cuál es la diferencia.“Por tratarse de un tema con un claro componente bilateral, usted fue un interlocutor natural, que pudo presenciar y participar, dentro de las normas diplomáticas, en varias etapas de este difícil proceso”, comentó el Canciller Stagno.
El embajador imperial, o sea, el embajador de los Estados Unidos, se va de Costa Rica. Y resulta que en la Cancillería le hicieron un homenaje textualmente el Diario extra dice: “Stagno ofreció un homenaje al representante de los Estados Unidos de América durante una ceremonia celebrada la noche del lunes en el Salón Dorado de la Cancillería, con la asistencia del Cuerpo Diplomático acreditado en nuestro país.”
Mark Langdale se va para su Texas natal, ya sabíamos que era un vaquero tejano, a dirigir una biblioteca. De embajador a director de biblioteca. Se va a dirigir la biblioteca George Walker Bush.
Nos parece sumamente irónico que haya una biblioteca con el nombre de alguien quien posiblemente apenas lee, o sea, quien apenas entiende lo que lee, porque Bush, así como que muy brillante, no es.
Ascenso o descenso no lo sabemos, y en realidad no nos importa. Como tampoco nos importa si le va mal a este señor, para que quede claro, no le deseamos éxito en su difícil tarea a Langdale.
Y es que a contrapelo de lo que manifiesta Stagno, no consideramos que Langdale haya sido un interlocutor.
Sencillamente porque no puede ser interlocutor quien ordena qué hacer, y eso fue lo que hizo este personaje imperial. Langdale en ningún momento dialogó, es más no tenía porqué hacerlo, el aprobar o no el TLC, es una potestad soberana de nuestro país, y ningún embajador tiene porqué meter las narices en estos asuntos.
Langdale, estuvo haciendo campaña abiertamente a favor del sí, de hecho Langdale fue quien pidió la intervención imperial desde Washington, recordamos que el mismo embajador lo confirmó en vivo el 7 de octubre cuando lo cuestionamos en el Tribunal Supremo de Elecciones.
En esa ocasión dijo con todo cinismo, y por supuesto con la complacencia de las autoridades de este país, y como no, de la prensa, que él había solicitado a la Casa Blanca que se pronunciara, según él para aclarar el asunto.
Pero la cosa no se quedó ahí el embajador gringo estuvo visitando empresas, y si eso no es meterse en los asuntos internos del país, no sabemos entonces que entiende el Tribunal Supremo de Elecciones por intervención extranjera en un proceso de decisión como el referendo.
El Tribunal Supremo de Elecciones ante denuncias de los sectores sociales le tiró la pelota a la Cancillería, aduciendo que no tenía competencia, y como vemos, la resolución de la Cancillería fue un homenaje.
Esperamos que el señor Stagno haya tenido la suficiente vergüerza, personal y profesional, como para que, por lo menos, alguien más haya puesto la alfombra, ya sería el colmo tanto servilismo.
Finalmente, aunque los productores de Radio 8 de Octubre no somos profesionales en Relaciones Internacionales, pero sí tenemos un poquito de dignidad, tenemos perfectamente clara cuál es la diferencia entre diplomacia y servilismo, es una lástima que el señor Stagno con una carrera académica tan brillante en esa materia, no entienda cuál es la diferencia.