Uy sra? Con esa boca le da besos a sus hijos?
O mejor dicho? Con esa boca le besa la lujosa suela a los hermanos arias?
Estas fueron las palabras que la cordial duquesa del cantón central de Alajuela manifestó a unos vecinos quienes le solicitaban una explicación del porque un portón instalado por un empresario en una calle pública en pueblo nuevo de alajuela les impide el acceso a su casa, situación que los vienen aquejando desde hace varios meses
Doña Joyce, ud tan “educada”, una señora de buena familia judía de la “jai clas”, con estudios en el extranjero y vajilla de porcelana…. ¡Que mal hablada doñita! Y pa peores en aras de la función pública y en el cumplimento de su deber como condesa de alajuela.
Pero al menos tenemos que reconocerle algo, lo admitimos, y es su cruda sinceridad. Pocos de esos maleantes con los que ud mal gobierna este pais son tan malencarados para dirigirse hacia la gente y al menos tienen la delicadeza de adornar sus insultantes retahílas con palabrejas de domingo
Pero ud, como dicen los alajuelenses desde tiempos del chunche: ¡la voló!
Gracias por su firmeza y honestidad, por decir lo que uds políticos corruptos que se llenan los bolsillos sin importarle las necesidades del pueblo, piensan cuando nos quejamos, cuando alzamos la voz aunque sea recurriendo a la institucionalidad
Y la verdad, doña Joyce, los que realmente estamos cansados somos nosotras y nosotros, que todos los días salimos a bretear pa que nos mal paguen y que pa peores las condiciones de trabajo son cada vez más precarias.
Estamos cansados que vivazos como ud se roben el salario que sale de nuestros impuestos, que hagan proyectos y políticas que nos empobrecen, que saqueen nuestros recursos naturales y privaticen las instituciones públicas, el agua, la electricidad, la telefonía, los seguros, los puertos… y ahora hasta ¡las calles!
Cansadas de la minería, los desastres de la piña, del banano y de la caña de azúcar, las marinas turísticas, el robo de agua para los grandes hoteles, la desigualdad social, el hacinamiento en barrios de mala muerte, la violencia contra la mujer, la corrupción desenfrenada en las esferas del poder y todo el mierdero que implica estar viviendo en la CR del siglo XXI.
Estamos cansados de que cada cuatro años traten de engañarnos con podridas elecciones y diarréicas promesas, que nos ofrezcan cielo y tierra para seguirnos despojando de lo poco que nos queda.
Por que somos nosotras y nosotros, quienes hasta perdimos el monopolio de las malas palabras, los que estamos hartos, pero bien hartos, de tanta mierda.