#JusticiaParaJerhy #Impunidad
Con el fallo de la sentencia emitido el día de ayer por el Tribunal de Justicia de Pérez Zeledón, el racismo institucional vuelve a garantizar la impunidad a quiénes históricamente han violentado a los pueblos originarios. Una vez más, el sistema de justicia del Estado costarricense, esta vez a través de sus jueces y «operadores de justicia», son parte de la violencia estructural que agreden a los pueblos, y sostienen las formas de represión, criminalización y asesinato contra quienes defienden sus territorios de la avaricia de quién tiene el poder del dinero.
Según el fallo del Tribunal se absuelve a Juan Eduardo Varela Rojas del delito de homicidio usando el principio de indubio pro reo, por dudas de cómo sucedieron los hechos, y se le impone dos años de cárcel por portación ilegal de armas, con posibilidad de exculpar su sentencia mediante medidas alternativas; argumenta que el contexto político violento no influyó en el crimen, y además se posicionan en contra de las recuperaciones territoriales como una forma de ejercicio del derecho.
Esta sentencia no sólo absuelve de culpabilidad a este asesino confeso por «no tener claro los hechos», a pesar de que el mismo Varela a confesado públicamente y con orgullo haber asesinado a Rivera; a pesar de que tanto Varela y sus acompañantes se mostraron siempre sonrientes y con una postura de despreocupación; a pesar que las pruebas científicas demuestran su culpabilidad. Esta sentencia también abre una carretera de posibilidades para que el usurpador ilegal de territorios elabore «sus montajes perfectos» para limpiar sus escenas del crimen y ampararse en la «defensa legítima» cuando violente y asesine a otra persona indígena que le incomode, algo que también aprendieron bien con el caso cerrado de Sergio Rojas Ortíz, de pueblo Bribri de Salitre.
No es casualidad tampoco que un trío de hombres con Poder tomaran esta posición para dictar la sentencia: son parte de esa burbuja tecnócrata de un pueblo racista que existe y convive en Pérez Zeledón, con una identidad cultural que ha sido forjada a partir del sometimiento y aprovechamiento de las personas indígenas y de sus tierras, y luego, despreciar su existencia.
Una vez más, los jueces realizan la tarea de cubrir de impunidad a los usurpadores ilegales de territorios y sus secuaces y limpian «desde lo legal» esta red de violencia sistemática que se mantiene contra los pueblos originarios de Costa Rica.
«Nosotros estimamos, de la misma forma que lo estimó la Fiscalía, existían suficientes elementos de prueba para una sentencia condenatoria»
Según declaran la Querella de la familia querellante, existían suficientes pruebas para condenar a Varela Rojas. A continuación las declaraciones del abogado John Brenes:
El abogado John Brenes comenta los recursos legales que quedan para agotar las instancias legales.
Según explica el abogado Brenes, en cuanto a la «responsabilidad penal de imputado, no se puede recurrir a instancias internacionales, juicio penal es inminentemente de las autoridades de Costa Rica.» Es decir, para que el asesino confeso de Jerhy Rivera reciba un castigo por el crimen, debe de ser juzgado en el sistema judicial de Costa Rica, pues los sistemas de derechos humanos internacionales tutelan las actuaciones de los Estados no de las persona físicas.
Para efectos de esta causa judicial, en caso de que se agoten las vías nacionales y Varela Rojas quede efectivamente absuelto por este crimen, lo que podría intentarse a través de un ente internacional sería juzgar la actuación del Estado por la violación de los derechos humanos y su responsabilidad en el favorecimiento a la impunidad. Así lo explica John Brenes.
