La negociación de una salida a la crisis política en Honduras continuará mañana, cuando las partes realicen las consultas respectivas para decidir si aceptan la propuesta del presidente costarricense, Oscar Arias.
Las delegaciones de Manuel Zelaya y Roberto Micheletti, los protagonistas de la crisis política hondureña, no alcanzaron un acuerdo el sábado y decidieron continuar el diálogo este domingo en San José.
“Hemos acordado que mañana continúan las deliberaciones. Vamos a reunirnos a partir de las 11H00 (17H00 GMT)” porque los delegados tienen que ir a misa, justificó el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, al término de una larga jornada de negociación de más de nueve horas.
“Ciertamente hay muchas diferencias”, dijo el mediador, quien aseguró que se necesita un “esfuerzo de flexibilidad para acercar posiciones” tras presentar a las delegaciones una hoja de ruta de siete puntos, entre los que la restitución de Zelaya en el poder hasta que termine su mandato el 27 de enero próximo aparece como el tema más difícil.
El coordinador de la delegación de Micheletti, su actual canciller Carlos López, pidió más tiempo para “reflexionar” y hacer “consultas a Tegucigalpa” sobre las propuestas para solucionar la crisis política generada tras el golpe de Estado del 28 de junio, dijo Arias.
Según la coordinadora de la delegación de Zelaya, su ministra de Energía, Rixi Moncada, Arias pidió a Zelaya que posponga su regreso a Honduras, previsto para este domingo, hasta el viernes 24 de julio.
Jornada productiva pero sin acuerdos
La jornada de diálogo que se realizó hoy en Costa Rica para buscar una salida al conflicto político en Honduras, transcurrió de manera “productiva”, pero hasta el momento sin un acuerdo sobre la solución propuesta por el mandatario costarricense y mediador, Óscar Arias.
Portavoces oficiales han informado de que se vive un ambiente “bueno” y “productivo” en la reunión entre las delegaciones que representan al presidente depuesto de Honduras, Manuel Zelaya, y al nuevo gobierno de Roberto Micheletti.
Se han cumplido ya más de seis horas desde que Arias leyó a las partes una propuesta de siete puntos para alcanzar una salida a la crisis, que gira en torno a la reposición de Zelaya en el poder y la conformación de un Gobierno de unidad nacional.
Desde entonces, ambas delegaciones han realizado numerosas llamadas telefónicas para consultar a sus líderes acerca de la propuesta de Arias, de acuerdo con fuentes cercanas al diálogo, pero la incertidumbre sigue siendo la tónica del día.
La extensa jornada de mediación, liderada por el mandatario costarricense podría continuar mañana, domingo, si las partes no resuelven algo concreto hoy, una posibilidad que se maneja con fuerza.
Los portavoces oficiales han asegurado que ninguna de las partes ha abandonado el diálogo en ningún momento, pero que no hay una hora prevista para la conclusión de la jornada de hoy.
Gobierno integrado con Zelaya al frente propone Oscar Arias
El presidente de Costa Rica, Óscar Arias elaboró un documento con los siete puntos, que a su juicio ayudarán a resolver la crisis en Honduras.
Dijo que la restitución del ex presidente Manuel Zelaya es el primer fundamento para lograr la reconciliación.
Como segundo requisito dijo que es necesario conformar un gobierno de unidad y reconciliación compuesto por representantes de los diferentes partidos políticos.
Considera como tercer aspecto conceder amnistía general exclusivamente para todos los delitos políticos cometidos con ocasión del conflicto, antes y después del 28 de junio.
Cuarto: la renuncia de Zelaya sobre colocar la cuarta urna en las próximas elecciones.
El quinto planteamiento es el adelantamiento de las elecciones nacionales del 29 de noviembre al último domingo de octubre y el adelantamiento de la campaña electoral de los primeros días de septiembre.
En el sexto punto, Arias ha considerado el traslado del comando de las Fuerzas Armadas del Poder Ejecutivo al Tribunal Supremo Electoral, un mes antes de las elecciones, para efectos de garantizar la transparencia y normalidad del sufragio, conforme con los términos de la Constitución de la República de Honduras.
En el último punto, el ex Premio Nobel de la Paz consideró que es necesaria la integración de una comisión de verificación compuesta por hondureños notables, miembros de organismos internacionales, en especial por representantes de la Organización de Estados Americanos, OEA, que vigile el cumplimiento de estos acuerdos y supervise el correcto retorno del orden constitucional.
“Estos son los siete acuerdos que piden los siete millones de hondureños, si se llegan a alcanzar, mi Gobierno se compromete a emplear todas las vías diplomáticas para gestionar el retorno inmediato de Honduras a la OEA y el levantamiento de las sanciones impuestas por otros gobiernos y organismos”, dijo Arias.
“Hoy quiero decirles a todos los delegados que no es grande el pueblo que nunca se equivoca, sino el pueblo que sabe enmendar los errores. Tienen la posibilidad de convertir un desastre en un prodigio, un fracaso en una victoria”, expresó.
Dijo que lo que pasó en Honduras no constituye un blasón de honor para nadie. Puso en evidencia la crónica fragilidad de nuestras democracias y la tentación siempre presente de apelar a la fuerza en lugar de la ley.
“Ambos sectores saben lo que está en juego y saben que el tiempo apremia, hay detalles mínimos que requieren paciencia podrían demorar en afinarse”, señaló Arias al leer el documento.